SE INVIRTIERON 42 MIL MILLONES DE PESOS EN LA EXPANSIÓN DEL SISTEMA DE SALUD NACIONAL

Durante el tiempo que lleva la cuarentena, el Ministerio de Salud Nacional invirtió 42 mil millones de pesos para la expansión del sistema de salud en todo el país para poder de esta manera brindar una mayor atención por la urgencia generada debido al COVID-19.

Gracias a esta inversión se incorporaron 3.929 camas de terapia intensiva y más de 4.000 respiradores en todo el país, aunque recalcan que continúa siendo fundamental mantener y reforzar las medidas de prevención de COVID-19 para que el sistema de salud no entre en tensión.

El secretario de Calidad en Salud, Arnaldo Medina señaló que “De 3.929 camas críticas pasamos a tener 12.450, lo que significa una ampliación del 46 % que seguramente pronto superará el 50%” y aseguró que  anteriormente el país contaba con 18,8 respiradores cada 100 mil habitantes, cifra que ahora asciende a 27,4 “Esto nos ubica en el primer lugar de Latinoamérica y en uno de los primeros a nivel mundial”.

Por otro lado, se añadieron nuevos hospitales en una de las áreas más afectadas por la pandemia como lo es AMBA y así mismo se trabajó en la ampliación de los establecimientos existentes. Como ejemplo, Medina mencionó el Hospital Cuenca Alta de la localidad de Cañuelas que “estaba en un 25% y se lo llevó al 100% de su capacidad”.

Además, otra de las estrategias que realizó el Ministerio de Salud de la Nación fue la capacitación del personal de salud en conjunto con la Sociedad Argentina de Terapia Intensiva y la Sociedad Argentina de Medicina, a través de cursos de modalidad virtual, con acompañamiento, revisión de casos y ateneos. Esto permitió también poner en marcha el plan de profesionales itinerantes, para que equipos de salud de distintos lugares del país se trasladen a las zonas más afectadas por el número de casos de COVID-19, como Chaco, Jujuy, La Rioja y Entre Ríos, entre otros.

Para finalizar, el secretario de Calidad en Salud recalcó que “la expansión de camas tiene un límite que son los trabajadores de la salud que en este momento están agotados y estresados por la alta carga laboral, sobre todo en las zonas con mayor ocupación de camas”.